El Institut Ramon Llull ha presentado este miércoles Parlamentos de Agua: Arquitecturas Ecosociales Proyectivas, la propuesta de Catalonia in Venice en la Biennale Architettura 2025, que invita a todo el mundo a unirse a una conversación global sobre futuros sostenibles y el papel crucial del agua en su configuración. Comisariada, diseñada y realizada por Eva Franch i Gilabert, Mireia Luzárraga y Alejandro Muiño, la exposición Parlaments d’Aigua investiga el papel fundamental del agua como recurso vital y agente cultural, y aborda la crisis climática desde la perspectiva de la arquitectura, la investigación interdisciplinar y el diseño innovador.
La 19ª Muestra Internacional de Arquitectura - La Biennale di Venezia está dirigida por el arquitecto y profesor italiano Carlo Ratti, que ha escogido como temática central Intelligens. Natural. Artificial. Collective. El director del IRL, Pere Almeda, ha afirmado que “en un mundo que va a la deriva, Carlo Ratti nos plantea hablar de inteligencias y es necesario que las apliquemos a la gestión del agua, elemento imprescindible para la viabilidad de cualquier ecosistema". Almeda también ha destacado que en la edición de este año habrá una “enorme” presencia de la arquitectura catalana y balear, tanto en la exposición oficial, con la participación de cinco estudios, como en otros pabellones, "esto demuestra que nuestra arquitectura está en los espacios de influencia, de debate global y de creación, proponiendo nuevos lenguajes y nuevas soluciones”. También ha recordado que el año que viene la arquitectura catalana y balear será protagonista a escala internacional por la celebración del Congreso Mundial de Arquitectura de la International Union of Architects (UIA) en Barcelona.
Eva Franch i Gilabert ha afirmado que “toda arquitectura es arquitectura del agua, ya que el agua juega un papel esencial no solo como recurso a consumir sino como un elemento estructural que articula nuestra vida”. En este sentido ha señalado que "este proyecto intenta poner la arquitectura al lado de una de las grandes crisis contemporáneas, que es la crisis hídrica, y ver cómo la arquitectura tiene la capacidad de responder a las aspiraciones colectivas como sociedad, a través de una práctica a menudo considerada como no esencial como es la especulación, la imaginación”. Mireia Luzárraga ha contextualizado cómo la crisis hídrica afecta a todo el planeta y ha explicado que en la investigación previa detectaron que faltan estudios críticos de los territorios catalán, valenciano y balear, "nos propusimos hacer este trabajo centrado en nuestro territorio, con la posibilidad de exportarlo a nivel planetario”. Por su parte, Alejandro Muiño ha puesto en valor la voluntad de “trabajar de manera interseccional donde la arquitectura se mezcle con la política, con el territorio, con la biología... e intentar pensar futuros multiespecie que nos permitan salir de esta problemática de manera democrática”.
El equipo comisarial ha explicado los cuatro elementos que estructuran el proyecto:
Los Laboratorios de Futuros, con más de 100 voces locales. En los últimos seis meses, los comisarios han realizado talleres multidisciplinares en todo el territorio catalán, balear y valenciano en colaboración con diferentes instituciones culturales. Estas sesiones han contado con la participación de científicos, artistas, agricultores y activistas y ponen en valor el conocimiento local para imaginar estrategias innovadoras que ayuden a afrontar un futuro inevitablemente condicionado por el cambio climático. Los Laboratorios de Futuros constituyen la base del trabajo que se expondrá en la Biennale di Architettura 2025.
La exposición en los Docks Cantieri Cucchini, Venecia. La instalación se divide en dos áreas. La primera presenta diversas piezas audiovisuales breves que ilustran el trabajo de investigación de este proyecto. La segunda área expone una colección de prototipos especulativos e instalaciones, las arquitecturas proyectivas, bajo una estructura de tejido tensada pero fluida. La instalación se acompaña de ciclos de niebla y soportes audiovisuales que contribuyen a ofrecer una experiencia sensorial única, creando un espacio poético de diálogo y acción.
El Libro. El proyecto incluye una publicación titulada 100 palabras para el agua: un vocabulario, que recoge más de 100 nuevos términos relacionados con el agua propuestos y definidos por colaboradores de todo el mundo como Stacy Alaimo, Markus Bader, Chan Carson, Beatriz Colomina, Cooking Sections, José Luis de Vicente, Elvira Dyangani Ose, Sana Frini, Macarena Gomez-Barris, Samia Henni, Andrés Jaque, Lydia Kallipoliti, Iván L. Munuera, Matsipa Mpho, Marina Otero, Spyros Papapetros, Philippe Rahm, James Taylor Foster, Julia Watson, Albena Yaneva y Liam Young. Editado por Eva Franch i Gilabert, Mireia Luzárraga y Alejandro Muiño, el libro es una iniciativa del Institut Ramon Llull y el Col·legi d'Arquitectes de Catalunya (COAC), y la editorial Lars Müller Publishers publica su versión en inglés.
El Atlas: Arquitecturas del Agua. Se trata de un repositorio en línea, actualizado a través de una convocatoria abierta, que documenta las interacciones de la arquitectura, la cultura y la ecología con el agua a escala local y planetaria.
Eva Franch i Gilabert (Delta de l’Ebre, 1978) es arquitecta, comisaria, investigadora y profesora en la UMPRUM de Praga. Ha dirigido instituciones como la AA Architectural Association de Londres y el Storefront for Art and Architecture de Nueva York, y ha impartido clases en diversas universidades, como Cooper Union, Princeton SoA, Rice University y Columbia University GSAPP. Considerada una de las voces más influyentes de la comunidad arquitectónica internacional, ha comisariado más de 30 exposiciones por todo el mundo, desde Taipéi hasta Buenos Aires y Berlín, explorando el futuro a través del arte, el diseño y la arquitectura.
Mireia Luzárraga (Madrid, 1981) y Alejandro Muiño (Barcelona, 1982) dirigen el estudio de arquitectura e investigación TAKK, con sede en Barcelona y Nueva York. Su trabajo combina feminismo y ecología para fomentar condiciones de vida más justas. Luzárraga es profesora adjunta en la Columbia University GSAPP de Nueva York y ambos son profesores visitantes en la Universidad de Tokio. Han recibido diversos premios, entre ellos el Design Vanguard 2024 y el FAD 2023, y su obra forma parte de colecciones de museos como el FRAC Centre, el Vitra Design Museum y el DHub Barcelona.
El Institut Ramon Llull produce y organiza la participación de Catalunya y Baleares en los Eventi Collaterali de la Bienal de Venecia y está presente en la Bienal de Arquitectura desde el año 2012, y en la Bienal de Arte desde 2009. El proyecto presentado siempre es seleccionado por un jurado formado por profesionales de amplia y reconocida trayectoria internacional. En esta ocasión, este comité de expertos estaba presidido por Pau Bajet y Tomeu Ramis, miembros del equipo comisarial de la propuesta Becoming, Architectures for a Planet in Transition del Congreso Mundial de Arquitectura de la Unión Internacional de Arquitectos (UIA) 2026, con un único voto. Los vocales fueron Maria Buhigas, arquitecta en jefe del Ayuntamiento de Barcelona; Judit Carrera, directora del Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB); Guim Costa, decano del Col·legi d’Arquitectes de Catalunya (COAC); Marina Otero Verzier, arquitecta, comisaria e investigadora, comisaria del pabellón de Holanda en la Bienal de Arquitectura de Venecia 2018 y co-comisaria de la 13ª Bienal de Shanghái 2021; y Eva Serrats, arquitecta y co-comisaria de la exposición de la cultura catalana en la Bienal de Arquitectura de Venecia 2023 (Siguiendo el pez).